Los últimos datos proporcionados por el Banco de España revelan un panorama financiero en Málaga que, aunque muestra un ligero aumento en la inversión, también indica un preocupante descenso en el ahorro de los ciudadanos. Este fenómeno, que se ha observado en el primer trimestre de 2025, plantea interrogantes sobre la salud económica de la provincia y las decisiones financieras de sus habitantes.
**Evolución del Ahorro en Málaga**
A finales de marzo de 2025, los depósitos bancarios en Málaga alcanzaron un total de 37.064 millones de euros. Esta cifra representa una disminución del 1,3% respecto a los 37.548 millones de euros registrados al cierre de 2024. En términos absolutos, esto significa que los malagueños han retirado cerca de 500 millones de euros de sus cuentas bancarias en solo tres meses. Este cambio es significativo, dado que es la primera vez desde el primer trimestre del año anterior que se observa una reducción en el ahorro acumulado.
La disminución en el ahorro puede atribuirse a varios factores. Uno de ellos es la bajada de los tipos de interés, que ha llevado a una disminución en la rentabilidad de productos de ahorro tradicionales, como cuentas corrientes y depósitos. Esto ha llevado a muchos a buscar alternativas de inversión más rentables. Además, el aumento en el costo de vida, especialmente en lo que respecta a la cesta de la compra y los alquileres, ha obligado a los hogares a utilizar parte de sus ahorros para cubrir gastos cotidianos.
A pesar de esta reducción, es importante destacar que el ahorro en Málaga sigue siendo un 40% superior al que se registraba en diciembre de 2019, cuando se acumulaban 26.241 millones de euros. Sin embargo, la tendencia actual sugiere que los malagueños están comenzando a utilizar sus ahorros de manera más activa, lo que podría tener implicaciones en la economía local.
**Aumento de la Deuda en la Provincia**
Paralelamente al descenso en el ahorro, la deuda de los malagueños ha experimentado un ligero aumento. A finales de 2024, la deuda total ascendía a 32.071 millones de euros, mientras que en marzo de 2025 se elevó a 32.232 millones de euros, lo que representa un incremento del 0,50%. Este aumento de aproximadamente 200 millones de euros indica que los malagueños están recurriendo más al crédito para financiar sus necesidades.
Este incremento en la deuda es inferior al promedio nacional, donde la deuda total ha crecido un 0,8%, alcanzando 1,21 billones de euros. Sin embargo, es relevante observar que la provincia de Málaga se encuentra en la séptima posición en términos de deuda bancaria, detrás de otras provincias como Madrid y Barcelona.
Uno de los factores que ha contribuido a este aumento en la deuda es la creciente demanda de hipotecas. En los primeros cuatro meses de 2025, se han suscrito casi 7.000 créditos hipotecarios en Málaga, lo que representa un aumento del 17% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este renovado interés por las hipotecas puede estar relacionado con las condiciones más favorables que ofrecen los bancos debido a la reducción de los tipos de interés.
La situación financiera de Málaga, con un ahorro en descenso y una deuda en aumento, plantea preguntas sobre la sostenibilidad de estas tendencias a largo plazo. Si bien el uso de créditos puede ser una herramienta útil para financiar inversiones y adquisiciones, un aumento desmedido de la deuda podría llevar a problemas financieros en el futuro.
**Perspectivas Futuras**
La combinación de un ahorro en descenso y un aumento en la deuda podría ser un indicativo de cambios en el comportamiento financiero de los malagueños. La incertidumbre económica, junto con el aumento de los precios en bienes y servicios, podría estar impulsando a los ciudadanos a utilizar sus ahorros y a recurrir más al crédito. Sin embargo, es crucial que los hogares y las empresas mantengan un equilibrio saludable entre ahorro y deuda para evitar riesgos financieros.
A medida que avanza el año, será fundamental observar cómo evolucionan estas tendencias. Si el ahorro continúa disminuyendo y la deuda sigue en aumento, podría ser necesario implementar medidas para fomentar una mayor estabilidad financiera en la provincia. Las autoridades locales y los expertos económicos deberán estar atentos a estos cambios y considerar estrategias que promuevan un crecimiento sostenible y saludable en la economía de Málaga.