La genetista Mary-Claire King ha sido reconocida con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2025, un galardón que destaca su labor en la detección del cáncer y en la identificación de personas desaparecidas. Con una carrera que abarca más de cuatro décadas, King ha realizado contribuciones significativas que han cambiado la forma en que entendemos la genética y su aplicación en la salud y los derechos humanos.
### Innovaciones en la Investigación del Cáncer
Mary-Claire King, nacida en Chicago en 1946, es conocida por su trabajo pionero en la identificación de los genes responsables de ciertos tipos de cáncer de mama y ovario hereditarios. En 1990, logró identificar el gen BRCA1, ubicado en el cromosoma 17, que se ha demostrado que está relacionado con el desarrollo de estos tipos de cáncer. Este descubrimiento no solo transformó la comprensión del cáncer, sino que también abrió nuevas vías para el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad.
Antes de los hallazgos de King, el cáncer era visto principalmente como una enfermedad de origen ambiental o relacionado con el estilo de vida, sin un enfoque claro en la genética. Su investigación ha permitido que millones de personas tengan acceso a pruebas genéticas que pueden ayudar a identificar su riesgo de desarrollar cáncer, lo que ha llevado a una mayor concienciación y prevención.
Además de su trabajo en el cáncer, King ha explorado la influencia de factores genéticos en enfermedades raras y trastornos como la esquizofrenia y la sordera hereditaria. Su enfoque innovador y su capacidad para aplicar modelos estadísticos complejos en genética poblacional han sido fundamentales para avanzar en la investigación médica.
### Compromiso con los Derechos Humanos
Uno de los aspectos más destacados de la carrera de Mary-Claire King es su compromiso con los derechos humanos, especialmente en el contexto de la identificación de personas desaparecidas. Su trabajo con las Abuelas de la Plaza de Mayo en Argentina ha sido crucial para la reunificación de familias separadas durante la dictadura militar. Utilizando un método conocido como ‘índice de abuelidad’, King ha ayudado a identificar a decenas de niños robados, permitiendo que muchos de ellos se reencuentren con sus familias biológicas.
La creación del Banco Nacional de Datos Genéticos en Argentina, la primera institución dedicada a preservar información genética para futuras identificaciones, es otro de los logros significativos de King. Este banco ha sido fundamental para la identificación de desaparecidos y ha proporcionado un recurso invaluable para las familias que buscan respuestas sobre el paradero de sus seres queridos.
La labor de King en este ámbito no solo ha tenido un impacto en Argentina, sino que ha servido como modelo para otros países que enfrentan situaciones similares. Su enfoque ético y su dedicación a la justicia han inspirado a muchos en el campo de la genética y los derechos humanos.
### Reconocimientos y Legado
Mary-Claire King ha sido reconocida con numerosos premios y honores a lo largo de su carrera. Es doctora honoris causa por más de veinte universidades en todo el mundo y miembro de prestigiosas academias científicas, incluyendo la Academia Nacional de Medicina y la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. Su influencia se extiende más allá de la investigación, ya que ha ocupado cargos relevantes en instituciones como el Instituto Nacional del Cáncer y el Consejo Científico de la Organización Mundial de la Salud.
En 2012, fue presidenta de la Sociedad Estadounidense de Genética Humana, donde promovió la importancia de la ética en la investigación genética y la necesidad de un enfoque responsable en la aplicación de la genética en la medicina. Su trabajo ha sido fundamental para establecer estándares en la investigación genética, asegurando que se respeten los derechos de los individuos y se protejan sus datos personales.
Mary-Claire King continúa su labor en la Universidad de Washington, donde sigue investigando y enseñando a nuevas generaciones de científicos. Su legado perdura no solo en los avances científicos que ha logrado, sino también en el impacto social de su trabajo en la vida de las personas. Su dedicación a la ciencia y a la justicia social la convierte en una figura inspiradora en el ámbito de la genética y los derechos humanos.