Caminar es una de las actividades físicas más accesibles y beneficiosas para la salud. Sin embargo, la forma en que se realiza esta actividad puede influir significativamente en sus beneficios. Recientemente, un estudio internacional ha arrojado luz sobre la importancia de la duración continua de las caminatas en comparación con la acumulación de pasos en intervalos cortos. Este artículo explora los hallazgos de la investigación y sus implicaciones para quienes buscan mejorar su salud cardiovascular a través de la actividad física.
### La Importancia de la Duración Continua
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Sídney y la Universidad Europea de Madrid ha demostrado que caminar de manera continua durante periodos de 10 a 15 minutos puede ofrecer mayores beneficios para la salud cardiovascular que realizar el mismo número de pasos en intervalos cortos. Este estudio analizó los hábitos de 33,560 adultos de entre 40 y 79 años que, al inicio del estudio, no padecían enfermedades cardiovasculares ni cáncer y que caminaban menos de 8,000 pasos diarios.
Los participantes utilizaron dispositivos que registraban no solo la cantidad total de pasos, sino también cómo los acumulaban. A lo largo de un promedio de ocho años, se siguieron sus datos de salud, revelando que aquellos que acumulaban la mayoría de sus pasos en caminatas continuas de al menos 10 a 15 minutos tenían un menor riesgo de mortalidad y de eventos cardiovasculares, como infartos o accidentes cerebrovasculares. En el grupo más sedentario, el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular se redujo del 15% al 7% entre quienes caminaban continuamente hasta 15 minutos al día.
Este hallazgo es crucial, ya que sugiere que no solo la cantidad de pasos es importante, sino también la manera en que se distribuyen a lo largo del día. Las personas que caminaban entre 10 y 15 minutos continuos tenían un 4% de riesgo de sufrir un evento cardiovascular, en comparación con un 13% entre quienes solo caminaban tramos de cinco minutos. Esto subraya la importancia de establecer patrones de caminata que favorezcan la continuidad.
### Cambios Sencillos para Mejorar la Salud
Los expertos coinciden en que no es necesario alcanzar los populares 10,000 pasos diarios para obtener beneficios significativos. El Dr. Matthew Ahmadi, coautor del estudio, enfatiza que para las personas más inactivas, cambiar caminatas breves y dispersas por trayectos continuos más largos puede traer mejoras significativas en la salud. Esto es especialmente relevante para aquellos que tienen un estilo de vida sedentario, ya que pequeños cambios pueden tener un gran impacto en su bienestar general.
El profesor Emmanuel Stamatakis, director del Mackenzie Wearables Research Hub, también destaca que los patrones de caminata son tan importantes como el número total de pasos. La idea de que se debe caminar un número específico de pasos puede ser engañosa. En lugar de obsesionarse con alcanzar un número, es más beneficioso centrarse en la calidad de las caminatas. Esto significa que incluso las personas muy inactivas pueden mejorar su salud cardíaca caminando durante más tiempo seguido, idealmente entre 10 y 15 minutos cuando sea posible.
Además, el investigador español Borja del Pozo sugiere que las personas que caminan poco deben reservar tiempo para hacerlo con más frecuencia y en sesiones más largas. Estos sencillos ajustes pueden marcar la diferencia en la salud cardiovascular y general.
La actividad física regular, como caminar, no solo mejora la salud del corazón, sino que también tiene otros beneficios significativos. Entre ellos se incluyen la mejora de la sensibilidad a la insulina, la estimulación de la liberación de endorfinas, la reducción del estrés, el mantenimiento del tono muscular, el fomento del equilibrio, la modulación de la inflamación y la potenciación de la función cerebral. Estos beneficios hacen que caminar sea una opción atractiva para quienes buscan mejorar su calidad de vida.
En resumen, la evidencia sugiere que la forma en que caminamos puede ser tan importante como la cantidad de pasos que damos. Para aquellos que buscan mejorar su salud cardiovascular, adoptar un enfoque que priorice caminatas continuas de 10 a 15 minutos puede ser una estrategia efectiva. Al hacerlo, no solo se reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, sino que también se promueve un estilo de vida más activo y saludable.
