Un pequeño insecto, conocido como mosca negra, ha comenzado a proliferar en diversas regiones de España, convirtiéndose en una preocupación para la población. Este insecto, que mide entre dos y seis milímetros, se encuentra principalmente en la vegetación cercana a los ríos y, aunque no es portador de enfermedades, su picadura puede resultar extremadamente molesta y dolorosa. Las autoridades locales han comenzado a implementar medidas de control para mitigar su impacto, especialmente durante los meses más cálidos del año, de mayo a octubre.
La Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) ha señalado que la mosca negra, perteneciente a la familia de los simuliidae, se ha expandido como una plaga en comunidades como Aragón, Catalunya, Murcia y Madrid. En la capital española, el Ayuntamiento ha iniciado labores de control en el río Manzanares, mientras que en València, el Ayuntamiento de Carlet también ha tomado medidas similares. Rosa Pérez, enfermera de Emergencias y responsable de Divulgación Ciudadana de SEMES, explica que este insecto se encuentra en grandes ríos como el Ebro y en diversas zonas del País Valencià.
### Características y Efectos de la Picadura
La mosca negra es un insecto hematófago, lo que significa que se alimenta de la sangre de otros animales, incluidos los seres humanos. Las hembras requieren este alimento para obtener los nutrientes necesarios para el desarrollo de sus huevos. Aunque en algunas partes del mundo pueden actuar como vectores de enfermedades, en Europa, según el Departamento de Control de Vectores de Madrid, no transmiten parásitos ni agentes infecciosos. Sin embargo, su picadura es dolorosa y puede causar molestias significativas.
Una de las características más notables de la mosca negra es su método de ataque. A diferencia de los mosquitos, que pican, las hembras muerden utilizando una boca en forma de sierra que rasga la piel, lo que puede provocar heridas dolorosas. Francisco Valera, investigador del CSIC, explica que la mosca negra inyecta un anestésico durante la mordedura, lo que puede hacer que la persona afectada no sienta el dolor inmediato. Esto puede llevar a que las mordeduras se infecten, especialmente si la persona se rasca la zona afectada. La picadura se presenta con un punto rojo central y una inflamación notable, y en personas sensibles puede causar picazón intensa y edema.
En caso de experimentar síntomas de alergia, SEMES recomienda acudir a Urgencias. Es importante evitar rascarse la picadura para prevenir infecciones, ya que las uñas pueden agravar la herida y aumentar el riesgo de complicaciones.
### Hábitat y Prevención de Mordeduras
La mosca negra se encuentra comúnmente en las cercanías de los ríos, donde su ciclo de vida se desarrolla en cuatro fases: huevo, larva, pupa y adulto. Las tres primeras fases son acuáticas y requieren aguas limpias y corrientes. Sin embargo, un estudio reciente ha descubierto una especie de mosca negra que se ha adaptado a un hábitat semidesértico en la península ibérica, lo que resalta la diversidad ecológica de este grupo de insectos.
Los adultos de la mosca negra son altamente móviles y pueden desplazarse hasta una docena de kilómetros, aunque generalmente permanecen cerca de los cursos de agua. La Agència de Salut Pública de Catalunya indica que estos insectos pueden encontrarse en gran número en arbustos y árboles cercanos a ríos, y sus larvas viven fijadas a piedras y vegetación en áreas de agua corriente.
Para prevenir las mordeduras de la mosca negra, es recomendable evitar pasear cerca de vegetación densa junto a los ríos. Si es necesario estar en estas áreas, se sugiere usar ropa de manga larga y pantalones, preferiblemente de colores claros para facilitar la identificación del insecto. El uso de repelentes específicos para moscas negras también es aconsejable, siendo el más eficaz aquel que contiene DEET. Este repelente debe aplicarse sobre la piel, evitando mucosas y heridas abiertas, y no se recomienda su uso en niños menores de dos años.
La proliferación de la mosca negra en España ha llevado a las autoridades a tomar medidas preventivas y de control, y es fundamental que la población esté informada sobre cómo actuar ante sus picaduras y cómo prevenirlas. Mantener limpios los cauces de los ríos y seguir las recomendaciones de expertos puede ayudar a reducir la población de este insecto y minimizar su impacto en la salud pública.