La entrega de las Banderas Azules en Torremolinos, celebrada en el emblemático Hotel Pez Espada, ha resaltado la importancia de la sostenibilidad en el turismo andaluz. Este evento, que tuvo lugar el 30 de mayo de 2025, no solo premió la calidad de las playas, sino que también lanzó un mensaje claro sobre la necesidad de cuidar el entorno natural como base para el desarrollo turístico. En total, Andalucía recibió 162 Banderas Azules, de las cuales 58 pertenecen a la provincia de Málaga, lo que representa un notable reconocimiento a la calidad de sus playas y servicios.
### Un Reconocimiento a la Excelencia en la Costa del Sol
Las Banderas Azules son un distintivo internacional que se otorga a playas y puertos deportivos que cumplen con criterios de calidad, seguridad y sostenibilidad. Este galardón, creado en 1985 por la Fundación Europea de Educación Ambiental, se ha convertido en un símbolo de excelencia en el sector turístico. En el evento, el consejero de Turismo y Andalucía Exterior, Arturo Bernal, destacó que la recuperación de la bandera en La Carihuela, tras casi 30 años, es un hito significativo que refleja el compromiso de la comunidad con la conservación del medio ambiente.
La entrega de estas distinciones no solo se limita a las playas marítimas; también incluye espacios de agua dulce y puertos deportivos. Esto demuestra un enfoque integral hacia la sostenibilidad, que abarca diversas áreas geográficas y tipos de entornos acuáticos. La presencia de Banderas Azules en 7 de las 8 provincias andaluzas subraya el esfuerzo colectivo de administraciones, empresarios y ciudadanos por mantener altos estándares de calidad en el turismo.
Durante el acto, la alcaldesa de Torremolinos, Margarita del Cid, enfatizó que el turismo de sol y playa sigue siendo un pilar fundamental para la economía local. Sin embargo, también subrayó la importancia de incorporar valores de sostenibilidad y excelencia en la oferta turística. La transformación de Torremolinos en un destino turístico de referencia internacional comenzó hace más de setenta años, y hoy se enfrenta al reto de adaptarse a las nuevas exigencias del mercado, que prioriza la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente.
### Nuevas Iniciativas para la Sostenibilidad
En el marco de este evento, se anunció una nueva línea de ayudas para playas, que se otorgará mediante un proceso de concurrencia competitiva. Esta iniciativa tiene como objetivo premiar proyectos que promuevan la sostenibilidad y el ahorro de agua, aspectos cada vez más relevantes en la gestión de recursos en el contexto actual de cambio climático. La primera convocatoria de estas ayudas contará con una dotación de 6 millones de euros, lo que representa un esfuerzo significativo por parte de la administración regional para fomentar prácticas responsables en el uso de los recursos naturales.
Las playas andaluzas que ya cuentan con una Bandera Azul, como la de El Encinarejo en Andújar y la del pantano de La Breña en Córdoba, también podrán optar a estos incentivos. Esto refleja un enfoque inclusivo que busca no solo mejorar las playas costeras, sino también aquellas ubicadas en el interior, ampliando así el alcance de la sostenibilidad en toda la comunidad autónoma.
El presidente de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac), Pepe Palacios, también hizo un llamado a las administraciones para que Sevilla, la única provincia sin Banderas Azules, trabaje para obtener este reconocimiento. Palacios destacó que los criterios evaluados por la asociación no son meramente técnicos, sino que representan derechos fundamentales que deben ser garantizados a la ciudadanía. La salud y la calidad de vida de las personas están intrínsecamente ligadas al entorno en el que viven, lo que hace imperativo cuidar y restaurar los espacios naturales.
El evento de entrega de las Banderas Azules en Torremolinos no solo celebró los logros alcanzados, sino que también planteó un futuro en el que la sostenibilidad y el turismo van de la mano. La colaboración entre los diferentes actores sociales y económicos es esencial para garantizar que las playas andaluzas sigan siendo un atractivo turístico de calidad, al tiempo que se preservan los recursos naturales para las futuras generaciones. La Costa del Sol, con su rica historia y belleza natural, se posiciona como un ejemplo a seguir en la implementación de prácticas sostenibles en el sector turístico.