El presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, ha instado a Junts a actuar con «sensatez» y «sentido común» en su relación con el Gobierno de Pedro Sánchez. En un contexto donde las tensiones políticas son palpables, Illa ha enfatizado la importancia de priorizar los intereses de los catalanes sobre las disputas partidistas. Su mensaje llega en un momento crítico, donde la alternativa al actual Gobierno, representada por el PP y Vox, es vista como una opción «involucionista» que podría llevar a un retroceso en los avances logrados.
Illa ha declarado que el Gobierno de Sánchez ha cumplido con los compromisos adquiridos con Junts en todo lo que estaba a su alcance. En referencia a la amnistía, ha subrayado que el Ejecutivo ha hecho lo que podía y que ahora es necesario esperar a que se cumplan los procedimientos necesarios para su implementación. Esta afirmación refleja la complejidad del panorama político actual, donde las expectativas y la realidad a menudo chocan.
### La Oficialidad del Catalán y el Diálogo con Europa
Uno de los puntos destacados por Illa ha sido la posibilidad de que el catalán obtenga oficialidad en la Unión Europea. Según el presidente, nunca se ha estado tan cerca de lograr este objetivo, lo que podría representar un avance significativo para la lengua y la cultura catalana. Sin embargo, también ha criticado al PP por intentar obstaculizar este proceso, sugiriendo que su oposición no tiene un fundamento claro y que solo busca generar divisiones.
El diálogo entre el Gobierno español y el alemán, que se produjo recientemente, ha sido un paso positivo en este sentido. Illa ha enfatizado que la colaboración internacional es crucial para avanzar en el reconocimiento de las lenguas cooficiales en la UE. Este enfoque resalta la importancia de la diplomacia y el entendimiento mutuo en la política contemporánea, especialmente en un contexto donde las tensiones internas pueden desviar la atención de los objetivos más amplios.
Además, Illa ha abordado la cuestión de la delegación de competencias en inmigración, señalando que la falta de apoyo por parte de Podemos ha impedido que se avance en este tema. Este aspecto pone de manifiesto las dificultades que enfrenta el Gobierno para mantener una mayoría estable en el Congreso, lo que a su vez complica la implementación de políticas que beneficien a la ciudadanía.
### La Tensión Interna en Junts y el Futuro Político
En cuanto a la situación interna de Junts, Illa ha evitado comentar si la presión que enfrenta el partido por parte de Aliança Catalana está influyendo en sus decisiones. Sin embargo, ha calificado a Aliança Catalana como un «proyecto extremista, populista y con tintes racistas y xenófobos», sugiriendo que su ascenso podría ser perjudicial para la cohesión política en Catalunya. Esta declaración refleja la creciente polarización en el panorama político catalán, donde los partidos deben navegar entre diferentes corrientes de opinión y expectativas de sus bases.
El expresident catalán Jordi Pujol, quien se enfrenta a un juicio en la Audiencia Nacional, también ha sido objeto de comentarios por parte de Illa. El presidente ha hecho una clara distinción entre la obra de Pujol al frente de la Generalitat y las causas judiciales que le afectan, lo que indica una voluntad de separar la política de la justicia. Este enfoque podría ser visto como un intento de mantener la estabilidad política en Catalunya, evitando que los escándalos judiciales afecten la percepción pública de la política catalana en su conjunto.
Illa ha expresado su deseo de que Pujol no tenga que declarar presencialmente en el juicio, citando su edad y estado de salud como factores a considerar. Esta postura muestra una sensibilidad hacia las circunstancias personales de los líderes políticos, incluso aquellos que han enfrentado controversias.
En medio de este complejo entramado político, Illa ha reiterado su compromiso con un diálogo constructivo y ha instado a todos los actores políticos a trabajar juntos por el bienestar de Catalunya. Su llamado a la sensatez y al sentido común resuena en un momento en que la política catalana se enfrenta a desafíos significativos, tanto internos como externos. La capacidad de los partidos para encontrar un terreno común y avanzar en cuestiones cruciales como la lengua, la inmigración y la justicia será determinante para el futuro político de la región.
