El Madrid Economic Forum (MEF) se presenta como un evento que va más allá de un simple encuentro sobre liberalismo y criptomonedas. Organizado por el youtuber Víctor Domínguez, conocido como Wall Street Wolverine, y el asesor fiscal Marc Urgell, el foro promete a sus asistentes una nueva perspectiva sobre el mundo. Con un enfoque en la economía neoliberal, el evento se llevará a cabo en el Palacio de Vistalegre los días 7 y 8 de junio, y contará con la participación de figuras destacadas del ámbito político y financiero, incluyendo al presidente argentino Javier Milei.
### Un Evento de Alto Costo y Exclusividad
El MEF no es un evento accesible para todos. Las entradas oscilan entre 60 euros por día y 7,500 euros para la entrada Diamond, que incluye beneficios exclusivos como acceso a un evento VIP y un coffee break con los ponentes. Este alto costo ha generado críticas sobre la exclusividad del evento, que parece estar diseñado para atraer a un público selecto que comparte ideologías ultraliberales y conservadoras. La presencia de personajes como Javier Milei, quien ha sido un defensor ferviente de políticas económicas radicales en Argentina, añade un atractivo especial al evento, aunque su participación no será oficial, lo que ha suscitado interrogantes sobre la naturaleza del encuentro.
Los organizadores han hecho hincapié en que los asistentes no solo escucharán a los ponentes, sino que también tendrán la oportunidad de interactuar con ellos en un ambiente que promete ser tanto educativo como provocador. Sin embargo, la falta de diversidad en el panel de ponentes, con una representación femenina mínima, ha sido objeto de críticas. La única mujer en el evento será Esperanza Aguirre, ex presidenta de la Comunidad de Madrid, quien hablará sobre las políticas de infraestructura de la región.
### La Retórica Conspirativa y el Contexto Político
Uno de los aspectos más intrigantes del MEF es su uso de la retórica conspirativa, un recurso común en la comunicación de la ultraderecha. En correos enviados a los asistentes, los organizadores han insinuado que hay fuerzas que intentan sabotear el evento, lo que ha sido utilizado como un llamado a la acción para movilizar a los participantes. Este tipo de discurso no es nuevo en la política contemporánea, donde las narrativas conspirativas pueden crear un sentido de comunidad entre los seguidores, haciéndolos sentir parte de una lucha más grande.
El evento también se enmarca en un contexto político más amplio, donde la polarización y la retórica extrema están en aumento. La participación de figuras como Iker Jiménez, conocido por su enfoque en lo paranormal y lo conspirativo, refuerza esta tendencia. Jiménez hablará sobre la crisis de los medios de comunicación, un tema que resuena con la narrativa de desconfianza hacia las instituciones tradicionales que caracteriza a muchos movimientos de derecha en la actualidad.
El MEF no solo busca ser un espacio de discusión sobre economía y política, sino que también se posiciona como un foro para la promoción de ideologías que desafían el statu quo. La inclusión de personajes como Mario Conde, un ex banquero condenado por fraude, refleja una estrategia de marketing que busca atraer a aquellos que se sienten marginados por el sistema actual. Conde es visto por algunos como un símbolo de resistencia contra un sistema que perciben como corrupto y opresor.
En resumen, el Madrid Economic Forum se presenta como un evento que no solo aborda cuestiones económicas, sino que también se adentra en el terreno de la ideología y la política. Con un enfoque en la exclusividad y la retórica conspirativa, el MEF busca atraer a un público que comparte una visión del mundo que desafía las normas establecidas. A medida que el evento se acerca, la atención se centrará en cómo se desarrollarán estas discusiones y qué impacto tendrán en el panorama político y económico de España y más allá.
