El Gobierno de España ha tomado la decisión de impugnar un acuerdo del Ayuntamiento de Jumilla, en la Región de Murcia, que prohíbe el uso de instalaciones deportivas municipales para la celebración de actos religiosos de la comunidad musulmana. Esta acción ha sido justificada por el Ejecutivo como una defensa de la libertad religiosa, un derecho fundamental que consideran vulnerado por la normativa local.
La controversia se originó tras un pleno extraordinario en el que se aprobó el acuerdo que limita el uso de los polideportivos municipales. Según el Gobierno, esta decisión no solo afecta a la comunidad musulmana, sino que también infringe el principio de igualdad en el acceso a espacios públicos, ya que se restringe el uso de estos lugares a actividades que no sean de carácter deportivo.
### Argumentos del Gobierno
El requerimiento presentado por la delegada del Gobierno en Murcia, María Dolores Guevara, sostiene que el acuerdo del Ayuntamiento carece de fundamento legal y que las razones esgrimidas para justificar la prohibición son arbitrarias. El Ejecutivo argumenta que la normativa vigente permite el uso de las instalaciones para actividades socioculturales, lo que incluye celebraciones religiosas.
El Gobierno ha señalado que la exclusión de actos religiosos sin una justificación objetiva y sin evidencias de perturbación del orden público es una restricción injustificada del ejercicio del culto. Esta postura se basa en criterios establecidos por el Tribunal Constitucional, que exige que cualquier limitación a los derechos fundamentales debe estar debidamente motivada y sujeta a un control de proporcionalidad.
En un mensaje en redes sociales, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, defendió la acción del Gobierno, afirmando que se oponen a las medidas extremistas que buscan restringir derechos fundamentales. Bolaños enfatizó que el Ejecutivo está comprometido con la defensa de la Constitución y la libertad religiosa, y que no permitirá que se impongan ideologías que excluyan a ciertos grupos de la sociedad.
### Reacciones y contexto
La decisión del Gobierno ha generado diversas reacciones en el ámbito político. Por un lado, algunos partidos han apoyado la postura del Ejecutivo, mientras que otros han criticado la intervención del Gobierno en asuntos locales. La controversia también ha puesto de relieve las tensiones existentes en torno a la libertad religiosa y la gestión de espacios públicos en España.
El acuerdo del Ayuntamiento de Jumilla, aprobado el 28 de julio de 2025, ha sido interpretado por el Gobierno como un intento de excluir a la comunidad musulmana de la vida pública, lo que contraviene el principio de neutralidad religiosa que debe regir en la administración pública. La administración local, según el Gobierno, no puede utilizar su potestad para imponer restricciones que favorezcan o desfavorezcan a determinadas confesiones religiosas.
Además, el Gobierno ha solicitado que se revoque el acuerdo que modifica el reglamento de uso de las instalaciones deportivas, argumentando que esta modificación es contraria al ordenamiento jurídico. La defensa de la libertad religiosa y el acceso equitativo a los espacios públicos son cuestiones que el Ejecutivo considera esenciales para garantizar la convivencia y el respeto entre diferentes comunidades.
La situación en Jumilla es un reflejo de un debate más amplio sobre la diversidad religiosa en España y cómo las administraciones locales gestionan la convivencia entre diferentes grupos. La impugnación del Gobierno podría sentar un precedente en la forma en que se abordan estos temas en el futuro, especialmente en un contexto donde las tensiones sociales y políticas están en aumento.
En resumen, la decisión del Gobierno de impugnar el acuerdo del Ayuntamiento de Jumilla pone de manifiesto la importancia de proteger los derechos fundamentales y garantizar la libertad religiosa en un país diverso. La respuesta del Ayuntamiento y la evolución de este caso serán seguidas de cerca, ya que podrían tener implicaciones significativas para la gestión de la diversidad religiosa en España.