La coalición valencianista Compromís se encuentra en una encrucijada que podría poner en peligro su permanencia dentro del grupo parlamentario de Sumar en el Congreso. Esta situación ha surgido a raíz de las discrepancias sobre la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la comisión de investigación sobre la DANA, un desastre natural que afectó gravemente al País Valencià. Las tensiones internas han llevado a la coalición a debatir si continuar o no en el grupo, lo que podría tener repercusiones significativas en la política española.
**Desacuerdos sobre la comparecencia de Sánchez**
La crisis se intensificó cuando Compromís denunció que Sumar había decidido no incluir a Pedro Sánchez en la lista de comparecientes para la comisión de investigación. Este hecho ha generado un profundo malestar entre los miembros de Compromís, quienes consideran que, dado el impacto de la DANA en su territorio, deberían tener voz y voto en la decisión de citar al presidente. La falta de consulta previa por parte de Sumar ha sido vista como una falta de respeto y una muestra de que Compromís no tiene el peso que debería dentro de la coalición.
Las reuniones internas de Compromís han sido intensas, con el ala de Més-Compromís liderada por figuras como Joan Baldoví y Àgueda Micó, discutiendo la posibilidad de romper con Sumar. La decisión de no citar a Sánchez ha sido calificada como «la gota que colma el vaso», ya que este no es un incidente aislado, sino parte de una serie de desacuerdos que han ido acumulándose con el tiempo. La percepción de que no se les permite participar en decisiones cruciales ha llevado a muchos en Compromís a cuestionar si su lugar está realmente en el grupo parlamentario de Sumar.
**Perspectivas de los diferentes partidos**
Mientras que Més-Compromís se muestra firme en su postura de que Sánchez debe comparecer, Iniciativa del Poble Valencià, otro de los partidos que conforma Compromís, tiene una visión más matizada. Aunque coinciden en que la comparecencia del presidente es necesaria, sugieren que debería realizarse en una fase posterior de la comisión, cuando se aborden las cuestiones relacionadas con la reconstrucción de las áreas afectadas. Esta diferencia de opinión refleja la complejidad de la situación y la diversidad de perspectivas dentro de la coalición.
Por otro lado, las fuerzas que componen Sumar han expresado su preocupación por la posibilidad de que la crisis interna de Compromís afecte la estabilidad del Gobierno de coalición. Muchos en Sumar consideran que citar a Sánchez podría desviar la atención de las verdaderas responsabilidades, que recaen en el presidente valenciano, Carlos Mazón. Esta postura ha llevado a un debate más amplio sobre la responsabilidad política y la gestión de crisis en el contexto de la DANA.
El portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, ha intentado calmar las aguas, asegurando que se alcanzará un acuerdo que incluya a Compromís. Sin embargo, la falta de claridad sobre la inclusión de Sánchez en la lista de comparecientes ha dejado a muchos en la coalición valencianista con un sabor amargo, sintiendo que sus preocupaciones no están siendo tomadas en cuenta.
**El futuro de Compromís en el Congreso**
La situación actual ha llevado a Compromís a reflexionar sobre su futuro dentro del grupo parlamentario de Sumar. La posibilidad de una ruptura no se descarta, y las próximas reuniones serán cruciales para determinar el camino a seguir. La falta de consenso y la creciente frustración podrían llevar a Compromís a considerar su salida del grupo, lo que tendría implicaciones significativas para la dinámica política en el Congreso.
Las tensiones entre Compromís y Sumar no son solo un problema interno; también reflejan las dificultades más amplias que enfrenta la coalición de izquierda en España. La falta de una mayoría estable y las diferencias ideológicas entre los partidos que la componen han llevado a un clima de incertidumbre, donde cada decisión se convierte en un campo de batalla político.
En este contexto, la gestión de la DANA y la respuesta del Gobierno se han convertido en un tema candente que podría definir el futuro de la coalición. La presión sobre Compromís para que actúe en defensa de los intereses valencianos es cada vez mayor, y la forma en que manejen esta crisis podría tener repercusiones duraderas en su relación con Sumar y en su propia identidad política.
La situación sigue evolucionando, y todos los ojos están puestos en las decisiones que tomen los líderes de Compromís en los próximos días. La política es un terreno volátil, y lo que hoy parece una crisis podría transformarse en una oportunidad para redefinir alianzas y estrategias en el futuro.