El empresario español Amancio Ortega, conocido por ser el fundador de Inditex, ha realizado una significativa inversión en el mercado inmobiliario irlandés al adquirir un edificio de oficinas en la zona portuaria de Dublín por un monto aproximado de 70 millones de euros. Esta operación, que se ha confirmado recientemente, marca la tercera compra de Ortega en Irlanda, consolidando su estrategia de diversificación en el sector inmobiliario europeo y estadounidense.
### Detalles de la Adquisición
El inmueble adquirido por Ortega cuenta con una superficie total de 6.344 metros cuadrados y estaba previamente en manos del grupo inmobiliario Kennedy Wilson y de la Agencia Nacional de Gestión de Activos (Nama). Actualmente, el edificio está alquilado a Fisery, una firma estadounidense de tecnología, lo que asegura un flujo de ingresos constante para el inversor español. Esta compra se cierra en un momento en que Ortega está intensificando sus actividades de inversión en el extranjero, especialmente en Europa.
A principios de abril, Ortega también adquirió un edificio de oficinas en Luxemburgo, que fue alquilado al prestigioso despacho de abogados Clifford Chance. Aunque el importe de esta transacción no fue revelado, se sabe que el inmueble había sido adquirido por Mapfre y Manova en 2020 por 60 millones de euros. Estas inversiones reflejan una tendencia creciente en el interés de Ortega por el sector inmobiliario, donde busca maximizar el rendimiento de los dividendos que recibe de Inditex.
### Estrategia de Inversión de Ortega
La estrategia de inversión de Amancio Ortega se centra en la adquisición de propiedades que no solo ofrecen un retorno financiero, sino que también están ubicadas en áreas con un alto potencial de crecimiento. Su enfoque en el mercado inmobiliario ha sido evidente en sus recientes adquisiciones, que incluyen un edificio en Barcelona, donde se encuentra la sede del Grupo Planeta, por 284 millones de dólares (250 millones de euros). Esta transacción se considera la mayor que ha realizado en España desde 2016, cuando compró la Torre Cepsa en Madrid por 490 millones de euros.
Ortega ha demostrado ser un inversor astuto, utilizando parte de los dividendos que recibe de Inditex para financiar sus adquisiciones inmobiliarias. Se estima que este año, Ortega recibirá alrededor de 3.104 millones de euros en dividendos, un incremento significativo respecto a los 2.845 millones de euros del año anterior. Este aumento en los dividendos, que se disparó un 28%, le permite continuar expandiendo su portafolio de inversiones.
La diversificación de su portafolio no solo se limita a la compra de edificios de oficinas. Ortega también ha incursionado en el sector hotelero, adquiriendo recientemente dos hoteles boutique en Palma de Mallorca por 35 millones de euros. Estas decisiones reflejan una visión a largo plazo, donde Ortega busca no solo rentabilidad, sino también estabilidad en sus inversiones.
### La Fortuna de Amancio Ortega
A medida que Ortega continúa expandiendo su imperio inmobiliario, su fortuna personal también ha crecido de manera exponencial. Según el ranking de Forbes, Ortega es considerado la mayor fortuna de España y ocupa el noveno lugar a nivel mundial, con un patrimonio estimado en 124.000 millones de dólares (114.943 millones de euros). Esta posición no solo lo coloca por delante de otros magnates españoles, sino que también resalta su éxito en el mundo de los negocios.
Su hija, Sandra Ortega, aunque también figura entre las fortunas más destacadas de España, ocupa el segundo lugar con una fortuna de 10.800 millones de dólares (10.011 millones de euros). La diferencia en sus patrimonios refleja el impacto que ha tenido Ortega en el sector empresarial y su habilidad para generar riqueza a través de inversiones estratégicas.
La capacidad de Ortega para identificar oportunidades en el mercado inmobiliario, tanto en España como en el extranjero, ha sido clave para su éxito. A medida que el mercado inmobiliario continúa evolucionando, es probable que Ortega siga buscando nuevas oportunidades que le permitan diversificar aún más su portafolio y maximizar sus rendimientos. Su enfoque en propiedades de alta calidad y su disposición a invertir en mercados emergentes son características que lo distinguen como un inversor excepcional en el competitivo mundo de los negocios.