La provincia de Málaga, reconocida por su notable crecimiento económico y su liderazgo en la creación de empleo, se enfrenta a un desafío crítico: la necesidad de un nuevo impulso en infraestructuras. A pesar de los indicadores macroeconómicos positivos, los empresarios locales han expresado su preocupación por un posible estancamiento si no se implementan mejoras significativas en las infraestructuras de movilidad, eléctricas e hídricas. Este diagnóstico ha sido respaldado por líderes de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM) y la Cámara de Comercio, quienes advierten que la falta de acción podría poner en riesgo el crecimiento sostenido de la región.
La voz de alarma ha sido lanzada por Javier González de Lara, presidente de la CEM y de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), quien enfatiza la necesidad de proyectar un plan claro con fechas y presupuestos para las infraestructuras. En sus palabras, «Málaga necesita un nuevo impulso en infraestructuras para sostener su crecimiento y su competitividad». Esta preocupación se extiende a la Cámara de Comercio, donde su presidente, José Carlos Escribano, subraya que la falta de grandes inversiones en movilidad y recursos hídricos podría llevar a un colapso energético.
### Infraestructuras de Transporte: Un Límite Operativo
El aeropuerto de Málaga, considerado la principal infraestructura de la provincia, se encuentra al borde de su capacidad operativa. A pesar de que el Gobierno ha comenzado a estudiar su ampliación, las obras no están previstas para comenzar hasta 2031. Esta situación ha generado inquietud entre los empresarios, quienes ven en la falta de avances un obstáculo para el desarrollo económico. Además, el acceso norte al aeropuerto sigue sin definirse, lo que complica aún más la situación.
En el ámbito ferroviario, la situación no es más alentadora. La falta de avances en el tren litoral y el retraso en la ejecución del tramo Algeciras-Bobadilla son motivo de frustración para los líderes empresariales. Ángel García Vidal, representante del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, destaca que la movilidad en la provincia se ha vuelto un problema crítico, exacerbado por el crecimiento económico y la crisis de vivienda que ha llevado a muchas familias a buscar residencia en municipios cercanos.
La necesidad de un modelo de movilidad integral que contemple las interconexiones entre diferentes medios de transporte es urgente. García Vidal enfatiza que no se trata solo de añadir más carriles para bicicletas o autobuses, sino de crear un plan cohesivo que aborde las necesidades actuales y futuras de la población. Este enfoque debe incluir la ampliación del aeropuerto y la mejora de las carreteras principales, como la ronda este y la A7, que actualmente sufren de congestión significativa.
### La Crisis Energética y Hídrica: Un Obstáculo para el Desarrollo
La crisis energética en Málaga es otro de los puntos críticos que los empresarios han señalado. Con el 92% de los nodos eléctricos de la provincia ya saturados, la capacidad para llevar a cabo nuevos proyectos está en riesgo. González de Lara advierte que la falta de planificación por parte de Red Eléctrica limita la posibilidad de evacuar la energía renovable que Andalucía produce, lo que podría llevar a un «apagón en materia de inversiones». Esta situación no solo afecta a los proyectos empresariales, sino que también pone en duda la viabilidad de iniciativas estratégicas promovidas por la Junta de Andalucía.
La infraestructura hídrica también se encuentra en una situación precaria. A pesar de los esfuerzos realizados por el gobierno autonómico, la falta de inversión estatal en este ámbito es alarmante. Los líderes empresariales han hecho un llamado a la acción, destacando que la interconexión entre las costas y el interior de Málaga es esencial para el desarrollo equilibrado de la provincia.
La falta de infraestructuras adecuadas ya está teniendo un impacto negativo en la economía local. Manuel Méndez, decano del Colegio de Economistas, subraya que la interconexión entre las costas y el interior es fundamental para el crecimiento sostenible de la región. La lentitud en la tramitación de proyectos y la falta de un plan claro para abordar estos desafíos son factores que podrían ralentizar el crecimiento económico de Málaga.
Los empresarios de Málaga están en un momento crucial. La necesidad de un nuevo impulso en infraestructuras es más urgente que nunca. La combinación de un crecimiento económico sólido y la falta de inversiones en infraestructuras críticas podría llevar a la provincia a un estancamiento. La colaboración entre las administraciones y el sector privado es esencial para garantizar que Málaga no solo mantenga su posición de liderazgo, sino que también continúe creciendo y prosperando en el futuro. La planificación y ejecución de proyectos de infraestructura deben ser una prioridad para asegurar un desarrollo sostenible y equilibrado en la región.