Las relaciones entre Ucrania y Rusia continúan deteriorándose, con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmando que Moscú está haciendo todo lo posible para evitar una reunión con su homólogo ruso, Vladimir Putin. En una reciente rueda de prensa en Kiev, Zelenski instó a los aliados de Ucrania a imponer nuevas sanciones a Rusia si no muestra interés en alcanzar la paz. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión y ataques por parte de las fuerzas rusas en territorio ucraniano.
Zelenski se reunió con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, para discutir las garantías de seguridad que otros países podrían ofrecer a Ucrania. El presidente ucraniano destacó la importancia de establecer garantías similares al Artículo 5 de la OTAN, que considera un ataque contra un miembro de la alianza como un ataque contra todos. «Este es el comienzo de una gran empresa, y no es fácil, porque las garantías consisten en lo que nuestros socios pueden dar a Ucrania, cómo debe ser el ejército ucraniano y dónde podemos encontrar oportunidades para que el ejército mantenga su fuerza», explicó Zelenski.
A pesar de los esfuerzos de Zelenski por establecer un diálogo, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha desestimado la posibilidad de una cumbre, afirmando que no hay una agenda clara para tal reunión. Lavrov acusó a Zelenski de rechazar cualquier propuesta, lo que, según él, ha dificultado el avance hacia un acuerdo de paz. En declaraciones a un medio estadounidense, Lavrov subrayó que Putin está dispuesto a reunirse con Zelenski, pero solo si hay una agenda adecuada que permita discutir un posible acuerdo para poner fin a la guerra en Ucrania.
### La postura de Rusia y las exigencias de Putin
Las tensiones entre ambos países se han intensificado, especialmente después de que Rusia lanzara un ataque masivo contra Ucrania, utilizando más de 500 drones y 40 misiles. Este ataque se produjo en medio de negociaciones por un alto el fuego, lo que ha llevado a Zelenski a solicitar a sus aliados que presionen a Rusia para que adopte una postura más constructiva en las conversaciones de paz.
Zelenski ha reiterado su disposición a reunirse con Putin, pero ha señalado que las acciones de Rusia están obstaculizando cualquier avance. «Los rusos están haciendo todo lo posible para impedir que se celebre la reunión», afirmó Zelenski, enfatizando que Ucrania no teme a las reuniones con líderes internacionales, a diferencia de lo que parece ser la postura rusa.
Por su parte, Lavrov ha insistido en que la falta de una agenda clara es el principal obstáculo para la reunión. Según él, Putin ha dejado claro que está dispuesto a discutir, pero solo si se presentan condiciones adecuadas. Lavrov también ha criticado a Ucrania por no mostrar flexibilidad en las negociaciones, lo que, según él, complica aún más la situación.
### La mediación de Estados Unidos y el papel de Trump
En medio de este conflicto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha expresado su interés en mediar entre ambos países. Durante una reciente cumbre entre Estados Unidos y Rusia, Trump indicó que había varios principios que Washington considera esenciales para avanzar hacia un acuerdo de paz. Entre estos principios se incluye la no adhesión de Ucrania a la OTAN y la discusión de cuestiones territoriales.
Sin embargo, Lavrov ha señalado que Zelenski ha rechazado estas propuestas, lo que ha llevado a una falta de progreso en las negociaciones. «Zelenski dijo no a todo», afirmó Lavrov, quien también mencionó que el presidente ucraniano se opone a la anulación de la legislación que prohíbe el uso del idioma ruso en Ucrania. Esta situación ha generado un ambiente de desconfianza entre ambas partes, dificultando aún más la posibilidad de un diálogo constructivo.
A medida que las tensiones continúan, la comunidad internacional observa de cerca los acontecimientos en Ucrania y Rusia. La posibilidad de una cumbre entre Zelenski y Putin sigue siendo incierta, y las acciones de ambos líderes en las próximas semanas serán cruciales para determinar el rumbo del conflicto. Mientras tanto, la situación en el terreno sigue siendo volátil, con ataques y contraataques que complican aún más la búsqueda de una solución pacífica.
