La crisis climática es un tema que ha ganado protagonismo en los últimos años, especialmente en el contexto de fenómenos meteorológicos extremos. Recientemente, el europarlamentario Hermann Tertsch, del partido Vox, ha generado controversia al calificar como «infame estafa» el uso de colores en los mapas de avisos por altas temperaturas. Esta declaración se produjo en medio de una ola de calor que afecta a España, lo que ha llevado a un intenso debate sobre la comunicación del riesgo climático y la responsabilidad de los funcionarios públicos en la difusión de información precisa.
### La Confusión en la Comunicación del Riesgo Climático
La polémica surgió cuando Tertsch comparó mapas de avisos de calor de 2017 y 2022, argumentando que la representación gráfica de las temperaturas era parte de una «industria del miedo». Sin embargo, la Asociación Meteorológica del Sureste (AMETSE) respondió a sus afirmaciones, aclarando que existen diferentes tipos de mapas que se utilizan para informar sobre las condiciones climáticas. Por un lado, están los mapas de avisos emitidos por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que utilizan colores como amarillo, naranja y rojo para indicar distintos niveles de riesgo por altas temperaturas. Estos mapas tienen como objetivo alertar a la población sobre los peligros potenciales para la salud durante episodios de calor extremo.
Por otro lado, existen mapas que simplemente muestran las temperaturas máximas previstas sin asociar ningún nivel de alerta. Esta distinción es crucial, ya que la confusión entre ambos tipos de mapas puede llevar a malentendidos y a la desinformación. La AMETSE enfatizó que quienes ocupan cargos públicos, como Tertsch, tienen la responsabilidad de comunicar información precisa y clara, especialmente en temas tan críticos como el cambio climático. En sus palabras: «Usted cobra un sueldo público. Saludos.»
### La Responsabilidad de los Funcionarios Públicos en la Era de la Desinformación
La declaración de AMETSE resalta un punto importante: la responsabilidad que tienen los funcionarios públicos en la era de la desinformación. En un mundo donde las redes sociales y otras plataformas digitales permiten la difusión rápida de información, la precisión y la claridad son más importantes que nunca. La retórica utilizada por figuras públicas puede influir en la percepción del público sobre temas críticos, como el cambio climático y la salud pública.
El negacionismo climático, como el que ha manifestado Tertsch, no solo es problemático por su contenido, sino también por el impacto que puede tener en la acción colectiva frente a la crisis climática. Cuando los líderes políticos minimizan o desestiman la gravedad del cambio climático, se corre el riesgo de que la población no tome en serio las advertencias de los expertos y las instituciones científicas. Esto puede llevar a una falta de preparación ante eventos climáticos extremos, que son cada vez más frecuentes y severos.
Además, la desinformación puede socavar los esfuerzos de las organizaciones que trabajan para educar al público sobre los riesgos del cambio climático y las medidas que se pueden tomar para mitigarlo. La confusión generada por declaraciones engañosas puede desviar la atención de las acciones necesarias para abordar la crisis, como la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la promoción de energías renovables.
En este contexto, es fundamental que los ciudadanos exijan a sus representantes una comunicación responsable y basada en evidencia. La ciencia debe ser la base de las decisiones políticas, especialmente en temas que afectan la salud y el bienestar de la población. La educación y la sensibilización sobre el cambio climático son herramientas clave para empoderar a la sociedad y fomentar un debate informado.
La respuesta de AMETSE a Tertsch es un recordatorio de que la comunicación sobre el clima debe ser clara y precisa. Los mapas de riesgo son herramientas útiles que pueden salvar vidas, y su correcta interpretación es esencial para la seguridad pública. En un momento en que el cambio climático se manifiesta de manera tangible a través de fenómenos meteorológicos extremos, es vital que los líderes políticos actúen con responsabilidad y se comprometan a proporcionar información veraz y útil a la ciudadanía.
La situación actual exige un enfoque colaborativo entre científicos, comunicadores y responsables políticos para garantizar que la información sobre el clima sea accesible y comprensible. Solo así se podrá construir una sociedad más resiliente y preparada para enfrentar los desafíos que plantea el cambio climático.